ATENCIÓN

Gracias a todos los que leyeron mi anterior aviso sobre las imágenes de san Juan Nepomuceno. Habéis sido muchos quienes me escribisteis para darme noticia de algún Nepomuceno que conocíais, y os lo agradezco de veras.

Ahora, siguiendo con otras investigaciones, estoy centrada en varios asuntos y quería volver a pedir vuestra colaboración: si alguien conoce cepillos limosneros con representaciones de santos y no le importa hacérmelo saber o mandarme una fotografía (raquelsiguenza@msn.com), lo agradeceré igualmente. También tengo interés en imágenes de ánimas (cuadros de ánimas, los mismos cepillos que mencionaba...)

¡Muchísimas gracias a todos por vuestra ayuda!

Iconografía oculta

Un apartado en el que todo el mundo puede participar. Cada semana os invito, a modo de juego, a descubrir qué se representa en una imagen. Podemos, entre todos, ir aportando pistas que, sin desvelar por completo el asunto, nos acerquen a la solución. Si tenéis interés por la iconografía, tanto cristiana como clásica, os animo a que enviéis vuestras opiniones. ¡Será divertido!





















jueves, 22 de septiembre de 2011

Un nuevo santo para identificar: san Florián

Aquí tenemos la respuesta al santo de la semana pasada: se trata de san Florián en una talla austriaca del último cuarto del siglo XV y custodiada en el Museo Cluny de París.


Su leyenda nos indica que fue un soldado romano de origen austriaco que, durante la persecución de Diocleciano se presentó en Lorch ante el prefecto Aquilino, tras saber que cuarenta de sus compañeros cristianos habían sido detenidos. Murió en 304 después de negarse a ofrecer sacrificios a los dioses, siendo arrojado al río Enns con una piedra de molino atada al cuello, lo que hizo que fuese invocado contra las inundaciones. Su cadáver quedó atrapado en una roca, y fue velado por un águila hasta que una mujer le dio sepultura en el lugar donde después se levantaría el convento agustino bajo su advocación.


Aunque escaso en España, es un santo muy popular en la región del Tirol y en Baviera, también en Cracovia y en Bolonia. A finales del siglo XV nació su patronazgo más conocido, el que le hace protector contra los incendios. Antes de ese momento, se le representaba con una piedra de molino y con vestimenta guerrera pero, desde entonces, su principal símbolo

parlante es un cubo de agua con el que apaga el fuego de un edificio (como en el ejemplar de la catedral de Vilnius, Lituania -derecha-). Supuestamente, esta función surgió del hecho de que, en la iglesia de Lorch, era venerado junto a san Lorenzo quien sí que había desempeñado su papel como protectos contra el fuego. Para equipararlos, se supuso que el las plegarias del santo guerrero habían apagado las llamas de un incendio en una casa. Y, de ahí, pasó a ser también patrón de los deshollinadores.

En Baviera y Austria, su imagen aparece pintada en las fachadas de las casas y suele coronar también las fuentes públicas.

Como curiosidad, en Centroeuropa resulta bastante habitual que forme pareja de san Juan Nepomuceno, siendo éste protector contra los peligros del agua.



Bibliografía: Louis RÉAU, Iconografía del arte cristiano. Iconografía de los santos A-F, Barcelona, Del Serbal, 1997p. 536-538



Imágenes: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Saint_Florian_Cluny.JPG?uselang=es; http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Saint_Florian_in_Vilnius_Cathedral.jpg?uselang=es



2 comentarios:

  1. Qué curioso lo del santo con el cubo de agua de Vilnius, no conozco nada parecido en España.

    Saludos!

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  2. Hola Roberto:

    Sí, la verdad es que no es un santo habitual en España. No quiero decir que no haya ninguno, porque tal vez alguno se podrá encontrar, pero la verdad es que yo tampoco he localizado ni uno solo en nuestro país...

    Gracias por pasar por aquí. Un saludo,
    Raquel

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